Por William Wagner
Pocos cristianos en Occidente están familiarizados con el término árabe
Da’wah. Muchas otras palabras como Jihad, Alá, Corán y
Ramadán son hoy palabras aceptadas por muchos diccionarios de la lengua
española, pero Da’wah sigue siendo un término desconocido. Una de las
razones es que se refiere a la forma silenciosa en que los musulmanes están
tratando de ganar nuevos adeptos para el Islamismo, especialmente en Occidente.
Da’wah es su revolución silenciosa, la cual gustan de relacionar con
un relato popular en el Medio Oriente:
Un árabe estaba haciendo un largo viaje a través del desierto, donde el calor
puede ser abrasador durante el día, pero las noches pueden ser muy frías. Una
noche especialmente gélida, el árabe estaba en su hermosa tienda, dentro de la
cual algunas brasas mantenían cálido el ambiente. Cuando el hombre empezaba a
quedarse dormido, notó la gran nariz de un camello insertada bajo la
tienda.
-Camello -dijo-, ¿por qué tienes la nariz en mi tienda?
-¡Oh, amo! -contestó el camello-. Está tan frío aquí afuera, que si sólo
pudiera calentarme la nariz, podría dormir a gusto.
Después de pensarlo, el árabe permitió que el camello dejara la nariz dentro.
Poco después, el hombre despertó y vio que el camello tenía ya toda la cabeza
dentro de la tienda.
-¿Qué estas haciendo, camello? Dijiste que sólo querías tener la nariz dentro
de la tienda.
-¡Oh, amo, no sabes el frío que hace aquí afuera! Pero si mi cabeza está dentro
de la tienda, estaré satisfecho.
Tras pensarlo nuevamente, el árabe accedió y volvió a quedarse dormido. Una vez
más despertó, esta vez para darse cuenta de que el camello tenía la cabeza, el
cuello y dos patas dentro de la tienda.
-¡Camello, esto es demasiado! ¡Deja de hacerlo!
-¡Oh, amo! Ahora estoy muy a gusto. Podré dormir toda la noche.
-¡Muy bien -dijo el árabe-, pero esta es la última vez!
Más tarde, el árabe despertó y descubrió que todo el camello estaba dentro de
la tienda, dejando para él muy poco espacio. -¡Camello! -gritó-. ¿Qué estás
haciendo?
-Si no estás contento con la situación, salte de mi tienda, árabe estúpido -fue
la respuesta del camello.
Da’wah es el método islámico consistente en tomar un pequeño trozo a
la vez utilizando argumentos algo convincentes. Los resultados podrían ser
bastante peligrosos para nosotros en Occidente.
Da’wah puede compararse con nuestra palabra “misiones”. El significado
de la palabra es “llamar” o “invitar”. Es una actividad en la que los
musulmanes salen al mundo e invitan a los no musulmanes a abrazar el Islamismo.
Una de las razones por las cuales esta es una de las religiones con más rápido
crecimiento en el mundo es que muchos musulmanes practican la Da’wah.
Otra palabra arábiga importante es daa’i, que significa misionero. Así
como los cristianos envían misioneros a los lejanos rincones de la Tierra, el
Islamismo también lo hace. De hecho, mis estudios me han convencido de que hoy
hay más daai’s trabajando en los Estados Unidos que misioneros
cristianos estadounidenses trabajando en todos los países musulmanes del mundo.
Están teniendo mucho éxito en su trabajo misionero.
La institución que guía esta renovación de las misiones musulmanas es “La Liga
Musulmana Mundial” localizada en La Mecca. Ellos son quienes desarrollaron esta
moderna estrategia y financian la mayoría del trabajo. Continuamente proclaman
grandes éxitos. Están desarrollando una forma de ecumenismo islámico mediante
el cual tratan de unificar a las diversas ramas del Islamismo para que trabajen
juntas con el propósito de establecer una umma mundial (Nación del
Islamismo). En Irak, los chiítas y sunitas pueden estar haciendo la guerra
civil, pero en realidad coinciden en su intento de convertir al mundo al
Islamismo.
Pero, ¿cuál es su estrategia?, ¿quiénes son sus objetivos? Estos son
algunos ejemplos:
1. Estudiantes universitarios – Se especializan en los
estudiantes extranjeros en Estados Unidos. Los ven como futuros líderes en sus
países de origen y, debido a que muchos daai también son estudiantes
extranjeros, esto les da un puente natural para actuar como misioneros entre
sus compañeros foráneos. Su labor ha sido muy exitosa. Otra estrategia es
construir grandes y costosos edificios en los departamentos de religión de las
universidades. Una vez construido el edificio, controlan el programa
insistiendo en la necesidad de que el dirigente del departamento sea un
musulmán.
2. Presos – En muchas prisiones norteamericanas realizan
una activa labor de Da’wah. Se ha estimado que ganan para el Islamismo
alrededor de 30,000 prisioneros al año. Con frecuencia convencen a los más
agresivos, a quienes será fácil reclutar para futuras organizaciones
terroristas islámicas. En un reciente libro titulado Islam in the Big
House [Islamismo en la Casa Grande], del autor Stephen Schwartz, se dice
que existe el peligro real de que las prisiones norteamericanas se estén
convirtiendo en centros de entrenamiento del extremismo wahhabi.
3. Indígenas norteamericanos – Los musulmanes piensan que
las religiones de los nativos norteamericanos tienen mucho en común con el
Islamismo. Incluso aseguran que muchos indígenas de tiempos remotos se
convirtieron al Islamismo por la vía de esclavos que llegaron a los Estados
Unidos. En la calle principal de Gallup, Nuevo México, la llamada Capital
Indígena de Norteamérica, se encuentra un gran número de mezquitas nuevas. Uno
de sus principales centros de entrenamiento para Occidente se localiza en el
área norte de Nuevo México, poblada por indígenas. Su mezquita y centro de
entrenamiento está en Abiquiu, Nuevo México.
4. Hispanoamericanos – No sólo en los Estados
Unidos están activos, sino también en América Central y América del Sur. Debido
a que en algún tiempo España fue musulmana, creen que pueden convencer a muchos
hispanoamericanos de que su religión natural es el Islamismo. En un reciente
artículo se estimaba que entre 40,000 y 70,000 hispanoamericanos ilegales se
habían convertido al Islamismo en los Estados Unidos. También con este grupo
están teniendo éxito.
5. Escuelas públicas – Oficinas de oradores musulmanes
que ofrecen dar clases de cultura gratis, se han puesto en contacto con la
mayoría de las escuelas de Estados Unidos. Aseguran que todos los estudiantes
necesitan saber más acerca de otras culturas. En California han tenido éxito al
lograr que muchas escuelas inviten a maestros musulmanes para enseñar los
fundamentos del Islamismo. En algunos casos los jóvenes se ponen nombres y
ropas musulmanas y practican algunas costumbres religiosas como oraciones, el
Ramadán y peregrinaciones. Un libro de historia mundial utilizado en el séptimo
grado de las escuelas californianas, tiene 74 páginas dedicadas al Islamismo y
sólo dos al Cristianismo, y la mayor parte de ellas era para la iglesia
católica. Su infiltración en las escuelas no es accidental, sino una estrategia
bien planeada. Por supuesto está prohibido que los cristianos hagan lo
mismo.
El Islamismo considera la Da’wah como una importante y útil
herramienta para tratar de dominar al mundo. No es correcto que nosotros los
cristianos condenemos lo que hacen los musulmanes, pero es necesario entender
la dinámica de la Da’wah antes de pretender llevarles el mensaje de
Jesucristo.
Published August 12, 2006